Budapest, dos ciudades en una
Buda y Pest, son dos mundos distintos unidos por puentes que a la vez tienen la misma esencia. La capital húngara es espectacularmente bella y pasear junto al Danubio, visitar el Parlamento y bañarse en sus balnearios un gran plan para quien decide disfrutar de esta ciudad tan romántica y monumental.
Budapest es espectacularmente bella. Ha sabido conservar su espíritu romántico y su monumentalidad a pesar de haber avanzado hacia la modernidad y ser una ciudad actual y preparada para todos. Esa es quizá la clave de su éxito: combinar a la perfección el pasado y el futuro en una armoniosa simbiosis. Admirar el Danubio y pasear junto a sus palacios antiguos pero también disfrutar de su vida nocturna, sus amplios boulevards con bares y restaurantes de moda. La capital húngara está dividida por el río Danubio, casi 30 kilómetros de aguas atraviesan la ciudad y eso hace que los puentes sean parte de su paisaje. Te dejamos una lista de las visitas imprescindibles en la ciudad.
Es una de las imágenes más famosas de Budapest y sin duda desde aquí tienes una de las mejores vistas de la ciudad porque este puente une las dos orillas: Buda y Pest. Te recomendamos cruzarlo a distintas horas del día porque es mágico y diferente según el momento.
CASTILLO DE BUDA. Un antiguo palacio que actualmente alberga la Galería Nacional, el Museo de Historia de Budapest y la biblioteca Széchenyi. Para llegar se coge un funicular y se sube hasta el Castillo.
La orilla de Pest no sería la misma sin el impresionante edificio del Parlamento, una de los más fotografiados de la ciudad. Es sin lugar a dudas uno de los edificios más bonitos de Europa y merece la pena visitarlo. Es posible hacer una visita guiada por su interior y admirar su famosa escalinata, la joyas de la corona, el salón de la cúpula y los frescos que adornan sus paredes. Es recomendable comprar las entradas con antelación porque suelen agotarse rápidamente.
BALNEARIOS DE BUDAPEST. Budapest es conocida como “la capital de los balnearios”; por lo tanto, visitar alguno de ellos es un plan que no hay que perderse. Desconectar y disfrutar de las aguas termales, especialmente en invierno y cuando hace frío. Es una experiencia relajante, única y diferente vivir el contraste del agua caliente con el frío en la cara y eso es algo que aquí es normal para los húngaros. Hay tantos balnearios que es complicado elegir pero sin duda los más famosos son el Balneario de Gellért, quizá el más conocido porque en su piscina interior de columnas se rodó hace años el anuncio del cuerpo Danone y el Balneario de Széchenyi.
COLINA DE BUDA
La zona que más lugares imprescindibles de Budapest tiene por metro cuadrado. Desde esta zona tienes unas vistas impresionantes de la zona de Pest.
COMER EN EL MERCADO CENTRAL
Una forma diferente y divertida de comer es mezclarse con los autoctónos y comer en el Mercado Central de Budapest. Es un tradicional mercado cubierto con decenas de puestos distintos con todo tipo de comida típica. También hay puestos de regalos y ropa si quieres llevarte algún recuerdo.
BASTIÓN DE LOS PESCADORES
El Bastión de los Pescadores es un mirador situado en la colina de Buda, en la orilla oeste del Danubio. Desde su cima se puede contemplar Pest en todo su esplendor y sus vistas son impresionantes.
Budapest es una ciudades europeas más bellas y una visita que no olvidarás.